El oficio de colchonero es uno de los oficios que se daban por desaparecidos, pero no es así, todavía existimos.
Es un trabajo el cual tengo total pasión y le dedico muchas horas al día haciendo el colchón adecuado a cada cliente.
Combino las fibras naturales con otros elementos como el muelle ensacado o el látex. No utilizo polímeros como la viscoelástica.
Tengo mi taller en Altorricón provincia de Huesca
Y este es mi estudio, es donde me paso horas y horas cosiendo colchones, pero la verdad es que me encuentro cómodo.
Disfrutar de un buen ambiente es importante los trabajos de colchonería necesitan de mucha paciencia y no tener ninguna prisa.
De aquí salen todos mis colchones artesanales cosidos totalmente a mano los cuales van a cualquier punto de la Península.
Desde hace ya muchos años hasta al día de hoy, no ha aparecido mejor fibra para el relleno de colchones que la lana de oveja.
Dormir con lana de oveja es dormir sano, un elemento muy seco y transpirable.
Cada vez más gente está interesada en los productos naturales y yo que utilizo varias fibras naturales puedo decir que no hay mejor fibra que la lana.
El público en general ya se está cansando de los polímeros, los clásicos colchones viscoelásticos y toda clase de espumaciones, esto son colchones derivados totalmente del petróleo.
Démosle vida al sector primario, participemos en una economía circular.
Un buen colchón es aquel el cual tiene horas de trabajo y principalmente con costuras manuales.
Es trabajo de artesano experto con años de experiencia.
Hay mucha diferencia en confort de un colchón sencillo fabricado industrialmente a uno hecho por un colchonero.
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